Los mejores tratamientos para la ortopnea
Cuando se habla de ortopnea se hace referencia a la dificultad para respirar cuando se está acostado y que se entiende como un signo o síntoma de la disnea, siendo en consecuencia una afección anormal ya que en algunas ocasiones incorpora molestias tan preocupantes como dolor en el pecho. Puesto que una recomendación general para estos pacientes consiste en mantener siempre la cabeza elevada para minimizar los inconvenientes, es una constante, la búsqueda de tratamientos para la ortopnea pues además del peligro que representa para la salud es algo bastante incómodo de manejar.
Una vez se tenga claridad sobre que es ortopnea, resulta mucho más simple concentrarse en encontrar soluciones, por lo tanto, no debe pasarse por alto que corresponde a la disnea en posición de decúbito supino.
El mejor tratamiento para la ortopnea
Puesto que el objetivo es conseguir que el paciente pueda respirar sin ninguna dificultad de por medio, para aliviar esta afección respiratoria lo primero será establecer con plena certeza aquello que la ha provocado pues esta información demarcará el camino apropiado para el enfoque de los pasos a seguir.
Desde el punto de vista farmacológico, existen alternativas bien definidas tal y como es el caso de los medicamentos que se especializan en estimular el flujo sanguíneo. Una dieta para tratar la sobrecarga de líquidos también es algo que ayuda bastante pues esta retención intensifica la sintomatología.
En estos pacientes es muy importante aliviar la ansiedad y esto se consigue mediante una orientación que despeje sus dudas, controles regulares y en ciertos casos recomendando el uso de mascarillas para asegurar la respiración.
Causas de la ortopnea
Son muchas las causas que se asocian a este padecimiento, entre ellos la excesiva acumulación de líquido en los pulmones, los trastornos de pánico, insuficiencias cardiacas, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), la apnea del sueño, la hipersensibilidad a los corticosteroides en pulverización nasal y los ronquidos, entre otros.
Si bien se habla mucho de que la obesidad es una causa de la ortopnea, debe tenerse muy claro que, aunque sí puede influir y agravas las cosas no es un factor directo como tal, pues una vez la persona adopte la posición adecuada puede mantener todo bajo control. Se sabe también que las personas con cuadros de asma o bronquitis crónica son más propensas a presentar esta manifestación, de manera que es mucho lo que interviene en lo que más que una enfermedad es un síntoma.