¿Qué es la anemia?

La anemia es un trastorno del estado de salud que se presenta debido a la disminución de hemoglobina en el sistema circulatorio, específicamente en la sangre. La anemia es producida en la mayoría de las ocasiones por la escasez de hierro en el organismo y por la mala o nula absorción que se realiza de este mineral.

Probablemente, la anemia sea uno de los padecimientos que más se suscitan alrededor del mundo y que se encuentran ligados a una mala alimentación, siendo las principales víctimas mujeres, ancianos y niños.

Otros factores que influyen en la aparición de anemia son la falta de complejo B12 y de ácido fólico; así como ciertos rasgos hereditarios. La forma más eficaz de prevenirla y de enfrentarla es el llevar a cabo una dieta saludable, equilibrada y rica en nutrientes.

A continuación te presentamos algunos alimentos que ayudarán a combatir y prevenir la anemia.

¿Cuáles son los síntomas de la anemia?

Uno de los síntomas habituales que se presentan cuando una persona sufre de anemia es el cansancio. Por lo que es probable que continuamente te sientas agotado o sin energía.

Además de cansancio, las personas que padecen anemia también pueden sufrir:

-Dificultades para respirar normalmente

-Dolores de cabeza

-Malestar muscular

-Color pálido en la piel

-Sudoración fría

No obstante los anteriores síntomas, la anemia leve no suele presentarlos, por lo que debemos de realizarnos revisiones médicas que nos permitan conocer nuestro estado de salud.

¿Cómo prevenir la anemia?

La mejor manera de prevenir la anemia es llevar a cabo una dieta variada y con los nutrimentos necesarios para realizar nuestras acciones día con día. A continuación te presentamos algunos alimentos que te ayudarán a prevenir la anemia o, en su caso, combatirla.

-Espinacas:

Generalmente, los vegetales verdes como la espinada, el brócoli o la lechuga presentan cantidades altas de minerales, entre ellos el hierro (esencial para combatir la anemia); la espinada contiene, entre otros elementos, calcio y vitaminas A, B, C y E.

-Ciertos alimentos de origen animal:

Algunos alimentos de origen animal como pescados, carne de res y huevos contienen excelentes porcentajes de hierro (además de proteínas). El hierro que consumimos a través de este tipo de productos suele ser procesado mejor y más rápido por el organismo.

-Tomates (jitomate):

Son de las mejores fuentes que contienen vitaminas E y C. Una buena idea es preparar jugos en los que incluyamos tomates, o bien, podemos cortarlo en rodajas y preparar frescas ensaladas.

-Avena:

Con unas cuantas cucharadas de avena al día podemos consumir, aproximadamente, entre 5 y 10 mg de hierro.

-Legumbres:

En general, las legumbres nos aportarán buenas cantidades de hierro. Entre ellas destacan las lentejas, la soya y los frijoles (algunas de ellas también tienen proteínas).

-Algunos frutos secos:

De entre ellos destaca el cacahuate. Con un puño de frutos secos (como almendras, cacahuates, nueces y avellana, entre otras) al día obtendremos un considerable porcentaje de hierro.

-Granadas:

Contiene fibra, diversas vitaminas y minerales (de entre ellos destaca el potasio). Aunque no contiene tanto hierro comparado con otros alimentos, puede ser una buena opción a considerar en caso de que no contemos con otros alimentos a la mano.